Pruébalas como desayuno de fin de semana o como una deliciosa cena, ya que la filloa admite casi cualquier cosa.
- 200g de harina
- 5-6 huevos
- 2 vasos de leche
Se baten todos los ingredientes y obtenemos una pasta bastante líquida. Si los huevos son muy grandes es mejor utilizar cinco y probar si la pasta que queda es lo suficientemente líquida para que se extienda bien por la sartén y además cuaje bien.
Cocción
Las filloas se prepararán en una sartén, preferiblemente de las que son para las filloas porque tienen el borde más bajo y la filloa será más fácil de voltear cuando esté lista.
Si no se dispone de esta sartén o plancha especial cualquier sartén sirve. Se pone al fuego y se unta con la ayuda de una servilleta mojada en aceite, para que no quede mucho aceite en la sartén y las filloas no salgan grasosas.
Una vez que la sartén esté bien caliente se echa una cucharada de la pasta en la sartén y se cubre el fondo de la sartén con la mezcla de modo que quede una película muy delgada en el fondo de la sartén.
Las filloas a diferencia de las tortitas son muy delgadas. Cuando los bordes de la filloa comiencen a dorar se voltea y se cocina por el otro lado. Se coloca en un plato y se apilan las filloas unas encima de las otras, asi conservarán mejor el calor y quedarán más suaves.
Consejos
Las filloas se cocinan muy rápido por lo que no debemos descuidar en ningún momento la sartén y debemos controlar el fuego para que no las queme.
Si quieres filloas dulces puedes echar un poco de azucar en la mezcla o espolvorear azucar encima de la filloa recien hecha.