Ingredientes
Bacalao: 800 gramos
Patatas: 3 medianas
Ajo: 2 dientes
Huevos: 2 grandes
Perejil: 1 ramita
Aceite: 1 chorrito
Sal: 1 pellizco
Almendras: 50 gramos
Harina: 1 cucharadita
Vino blanco rancio: 1/2 copa
Agua: 1/1 copa
Cebolla: 1/2 pequeña
Preparación
El día antes de preparar las albóndigas se pone el bacalao en remojo para desalarlo, procurando de cambiar el agua unas tres veces para que no quede nada de sal
Al día siguiente se escurre el bacalao, se secan los trocitos con papel de cocina absorbente y se reservan
En un cazo a parte, se cuecen las patatas enteras con la piel y todo y se dejan hervir durante aproximadamente 45 minutos
Una vez cocidas se dejan enfriar, se pelan y se reservan
Se coje nuevamente el bacalao y se desmenuza procurando quitar la piel y las espinas
Se mezcla el bacalao desmenuzado con las patatas y se tritura en la batidora. Debe quedar una textura gruesa y cremosa, en caso de quedar una masa demasiado blanda se puede espesar con copos de patata deshidratada
Se agregan los dos huevos previamente batidos y el ajo y el perejil picados
Se mezcla todo bien y se deja reposar en la nevera durante 8 horas
Con la masa a punto se va cogiendo la masa y se le va dando forma de albóndigas
Se rebozan las albóndigas con harina y se fríen en abundante aceite caliente
Una vez rebozadas se ponen en una fuente cubierta de papel absorbente para que absorba los excesos de aceite
Por otro lado se preparar una salsa picando pica la cebolla bien finita y se fríe hasta que esté transparente. Entonces se añade 1/2 cucharada de harina y se remueve hasta que quede una mezcla homogénea
A parte, se pica el ajo y el perejil y las almendras y se incorpora el vino y el agua
Se agrega esta picada a la sartén con la mezcla previa de cebolla y la harina y se deja hervir todo junto a fuego lento durante 1 minuto
Se corrige el punto de sal de la salsa y cuando ya esta al punto se riegan las albóndigas con esta salsa
Se hace hervir todo durante unos 15 o 20 minutos removiendo de vez en cuando para evitar que se peguen y finalmente se sirve bien caliente
La sociedad está dividida en dos grandes clases: La de los que tienen más comida que apetito y la de los que tienen más apetito que comida.